Desde muy joven aprendí que lo único constante en la vida es el cambio. Algunas personas se vuelven adversas a él y hacen todo en su poder para controlarlo, otras reciben al cambio con los brazos abiertos y gozan de las emociones y los desafíos que vienen con el. Yo por mi parte, como muchos ya saben, soy de aquellas personas que sonríen al ver que se viene un cambio. En los últimos cuatro años he vivido en más de cinco ciudades en dos continentes distintos y he disfrutado cada minuto de esta experiencia . Por supuesto, algunos días me la pase extrañando a mi familia y amigos o deseando poder dormir en mi cama, pero todo lo que aprendí, las habilidades que he desarrollado, y los recuerdos que he hecho definitivamente valieron la pena. Este último diciembre, me casé con mi mejor amigo y el amor de mi vida. Un cambio signifcante que para varias parejas resulta en mayor estabilidad y permanencia pero, para nostros es todo lo contrario. Justo cuando pensábamos que nos quedaríamos en un lugar por más de un año nos transfirieron a Toronto, Ontario, Canadá . Así es, una nueva etapa de vida, nueva ciudad, nueva parte del continente Americano, nuevos amigos, nuevo "hogar " y una nueva cultura.

Cambio, cambio, cambio . Creo que ahora nuestra familia y amigos ya ni se sorprenden al enterarse que nos vamos a mudar. De hecho, estoy bastante segura de que a veces se emocionan porque significa que tendrán que visitar nuevos lugares que tal vez nunca se les hubiera ocurrido. Érase una vez una trayectoria profesional que me llevó a lugares inimaginables, y sí, a veces tengo que explicar por qué mi currículum parece como si estuviera huyendo de la ley, pero estoy feliz porque que esta vez tengo alguien con quien compartir estas experiencias.

Con la ayuda de mi hermano creé este sitio web/blog/albúm de fotos o memorias, llamalo como quieras, para mantener contacto con la familia y amigos, para compartir historias y pensamientos, para expresarme mientras sigo explorando los caminos por los cuales me lleva la vida.